Oftalmología pediátrica: problemas oculares más comunes en niños | Innova ocular
La visión es uno de los sentidos más importantes en el desarrollo y el aprendizaje de un niño. La capacidad de ver claramente el mundo que le rodea es fundamental para su desarrollo cognitivo y su bienestar general. Por ello, la Oftalmología pediátrica es una atención médica necesaria para todos los niños.
Los problemas oculares en niños son más comunes de lo que podríamos pensar, y es esencial estar atentos a las señales y síntomas para abordarlos a tiempo y prevenir complicaciones a largo plazo. Miopía e hipermetropía son las más conocidos, pero existen otros problemas que conviene conocer. En este artículo, exploraremos los problemas oculares más habituales en niños y cómo identificarlos.
Miopía
La miopía, o visión cercana, es uno de los problemas oculares más comunes en niños. Se caracteriza por la dificultad para ver claramente objetos distantes. Los niños con miopía pueden entrecerrar los ojos o acercarse mucho a los objetos para ver con claridad. Este problema ocular tiende a empeorar a medida que los niños crecen, por lo que es fundamental detectarlo a tiempo.
La miopía puede estar relacionada con factores genéticos, pero también puede desarrollarse debido al exceso de tiempo que los niños pasan frente a pantallas electrónicas o la falta de actividad al aire libre. El diagnóstico temprano y la corrección con gafas o lentes de contacto son esenciales para prevenir complicaciones a largo plazo, como el aumento de la miopía o el riesgo de desprendimiento de retina en la edad adulta.
Hipermetropía
La hipermetropía es otro problema ocular común en niños. A diferencia de la miopía, los niños hipermétropes tienen dificultades para enfocar objetos cercanos. Esto puede llevar a la fatiga visual, dolores de cabeza y dificultades en la lectura y otras actividades escolares.
La hipermetropía también puede ser genética, pero a menudo se corrige de manera natural a medida que el niño crece y su globo ocular aumenta de tamaño. Sin embargo, en algunos casos, la hipermetropía persiste y requiere corrección con gafas o lentes de contacto. Es importante evaluar la vista de los niños regularmente para detectar este problema a tiempo.
Estrabismo
El estrabismo es una condición en la que los ojos no están alineados correctamente y no miran en la misma dirección. Puede ser evidente desde una edad temprana y a menudo se nota cuando el niño cruza los ojos o tiene un ojo desviado. El estrabismo puede ser constante o intermitente y puede afectar la visión en uno o ambos ojos.
El estrabismo puede causar problemas de visión y de desarrollo en los niños, ya que el cerebro puede suprimir la imagen del ojo desviado, lo que lleva a la ambliopía o "ojo vago". Tratar el estrabismo a tiempo es esencial para evitar complicaciones permanentes, como la pérdida de la visión en uno de los ojos. El tratamiento puede incluir terapia visual, parches o incluso cirugía en casos graves.
Ojo vago o ambliopía
La ambliopía, también conocida como "ojo vago", es una afección en la que un ojo no desarrolla una visión normal durante la infancia. Esto puede ser causado por estrabismo, anisometropía (diferencia significativa en la graduación entre ambos ojos) u otros factores. Si no se trata, la ambliopía puede convertirse en una discapacidad visual permanente.
El tratamiento de la ambliopía generalmente implica el uso de un parche en el ojo dominante para fomentar la visión en el ojo afectado. Cuanto antes se detecte y trate esta afección, mejores serán los resultados.
Conjuntivitis
La conjuntivitis es una inflamación de la membrana transparente que cubre el ojo y el interior de los párpados (conjuntiva). Esta afección puede ser causada por infecciones virales o bacterianas, alergias o irritantes. Los síntomas incluyen enrojecimiento, picazón, secreción y sensación de cuerpo extraño en el ojo.
La conjuntivitis es altamente contagiosa y puede propagarse fácilmente en entornos escolares y hogares. Es importante que los padres estén atentos a los síntomas y eviten que los niños infectados compartan objetos personales como toallas o almohadas. El tratamiento depende de la causa subyacente e incluye colirios antibióticos en caso de infecciones bacterianas y antihistamínicos en caso de alergias.
La salud ocular de los niños es fundamental para su desarrollo y bienestar. Los problemas oculares más habituales en niños pueden tener un impacto significativo en su calidad de vida si no se tratan a tiempo. Es por ello que se debe estar atentos a las señales y síntomas de estos problemas y acudir a exámenes oculares regulares con un oftalmólogo especialista. La detección temprana y el tratamiento adecuado son clave para prevenir complicaciones a largo plazo y garantizar que los niños tengan una visión saludable a lo largo de su vida. En las clínicas Innova Ocular contamos con la unidad especializada en Oftalmología infantil, donde podemos detectar y tratar cualquier enfermedad ocular en niños.