Dolor de cabeza y ojos: ¿qué relación tiene? | Innova ocular
El dolor de cabeza es, con toda probabilidad, la dolencia más común y más extendida en la sociedad actual, tanto por número de personas que la sufren como por la frecuencia con la que les ocurre -no hay más que ver las cifras de venta de los fármacos con los que se trata…-. Quizá ese sea uno de los motivos por los que se ha llegado a aceptar como algo común y, en general, a no darle demasiada importancia. Afortunadamente, en un porcentaje mayoritario de casos, no la tiene y el problema, a menudo transitorio, se soluciona sólo, eliminando o tratando el origen del mismo (cuando esto es posible, véase en situaciones de estrés, depresión, ansiedad…) o con la ingesta de algún analgésico. Pero aunque la causa puede ser de lo más inofensiva, el dolor de cabeza también puede ser síntoma de algún problema más importante, a menudo relacionado con la vista, por lo que saber la posible relación entre el dolor de cabeza y los ojos es muy importante.
Dolor de cabeza y problemas de visión
- Problema refractivo no detectado, no tratado o mal corregido. La miopía, la hipermetropía y el astigmatismo obligan a mejorar el enfoque contrayendo la musculatura que rodea los ojos, lo que supone un sobreesfuerzo y causa fatiga visual, y ésta, a su vez, dolor de cabeza. Estos síntomas, además, suelen ir acompañados de otros como visión borrosa, de aureolas en torno a los focos de luz, fotobofia o escozor.
- Estrabismo sin diagnosticar y/o corregir. En este caso el gran esfuerzo que debe hacer quien padece este problema para mantener sus ojos paralelos y así poder ver con claridad, también puede provocar dolor de cabeza.
Especial importancia hay que dar en estos dos casos a la existencia de estos problemas en la población pediátrica, ya que los niños pueden no darse cuenta de que tienen problemas de visión o no saber comunicarlos o explicarlos, por lo que es fundamental que los padres observen si sus hijos fuerzan mucho la vista, tuercen los ojos al fijarla, se acercan mucho a la televisión o a un cuento, se quejan de ojos irritados o de dolores de cabeza frecuentes. Y, por supuesto, las revisiones oftalmológicas periódicas cumplen aquí un papel clave.
- Fase inicial de presbicia o presbicia no tratada o mal corregida. El sobreesfuerzo que requiere la compensación de acomodación del enfoque vuelve a ser causante de numerosos casos de dolor de cabeza en estas situaciones.
- Glaucoma, especialmente el agudo, que se caracteriza por la aparición repentina de un dolor muy intenso originado en el ojo pero que puede irradiarse a la cabeza y producir, por tanto, un no menos importante dolor de cabeza.
Causas del dolor de cabeza
No sólo hay que contemplar esta relación de la existencia de un problema de visión como origen de un dolor de cabeza, sino también al contrario, ya que existen distintas causas que pueden generar un dolor de cabeza (o directamente de ojos, como el exceso de tiempo frente a pantallas electrónicas, el televisor o los estudios), entre cuyas consecuencias figure un problema o molestia ocular. En este contexto, algunos de los ejemplos más típicos son estos:
- Sinusitis. El dolor originado en un seno paranasal obstruido o infectado puede convertirse en un dolor orbitario, alrededor de los ojos, sin que por ello exista problema ocular alguno.
- Cefaleas tensionales. La tensión o contractura de los músculos del cuello y de la base de la cabeza o la artrosis de las vértebras que se produce en estas situaciones puede acabar reflejándose en zonas como los ojos y las sienes.
- Migrañas. El dolor en este caso suele ubicarse en un lado de la cabeza, más cerca de uno de los dos ojos, y a menudo es discontinuo y viene acompañado por otros síntomas como la visión de luces multicolores minutos antes de que aparezca la migraña, causada por la dilatación de las paredes de los vasos sanguíneos de la cabeza.
Como hemos dicho, los dolores de cabeza pocas veces nos llevan a la consulta del médico y, cuando son esporádicos y cortos, lo normal es que nuestra actuación sea correcta. No obstante, ante cualquier duda o inquietud, o si estos dolores se vuelven frecuentes y se dan en episodios largos, lo más recomendable es acudir al profesional de la Medicina. Y, por supuesto, si van acompañados de molestias, dolores o problemas en los ojos, la mejor visita que puedes hacer es al oftalmólogo. Puede que unas simples gafas o la corrección de las mismas, sumadas o no a la incorporación de determinados hábitos de higiene visual, solucionen para siempre la dichosa molestia.
Por ello, en Innova Ocular ponemos a tu disposición a nuestro completo y especializado cuadro médico, que resolverá tus dudas, te informará y te aconsejará la mejor solución para cada problema.
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